Saturday 1 November 2025
Home      All news      Contact us      RSS      English
eldiario - 1 days ago

Fue una masacre, no una operación policial : conmoción en Río de Janeiro por la brutal redada con más de 130 muertos

Los vecinos de la favela Vila Cruzeiro se afanan en recoger los cadáveres tras el ataque de las fuerzas del ordenAl menos 132 muertos en la operación policial más letal de la historia de Río de Janeiro A n no hab a amanecido, pero en la calle principal de la favela Vila Cruzeiro ya hab a decenas de cad veres esparcidos tras la operaci n policial m s letal en la historia de R o de Janeiro, en la que murieron m s de 130 personas. Desfigurados hasta lo grotesco y manchados de sangre, los cuerpos hab an sido arrastrados desde los bosques cercanos y reposaban sobre las lonas azules y l minas de pl stico negras que cubr an la calle. S lo yo he tra do a 53... Debe de haber otros 12 o 15 all arriba, en el bosque , dice el presidente de la asociaci n de vecinos, Erivelton Vidal Correia, con los ojos llorosos tras una noche en vela bajando del cerro cuerpos de vecinos del barrio acribillados a balazos. Vidal Correia se desmorona al recordar la incesante b squeda nocturna de cad veres tras esta masacre policial en R o, una de las peores en la historia moderna de Brasil. Nunca hab a visto nada igual en mi vida, hermano, ni siquiera en la Franja de Gaza ocurre esto... No puedo soportar ver m s cad veres , cuenta llorando y cubri ndose la cara con los guantes quir rgicos que se hab a puesto para mover los cuerpos. Las autoridades de R o comunicaron el martes que al menos 64 personas, cuatro agentes de polic a entre ellas, hab an perdido la vida en la operaci n policial desplegada por 2.500 agentes antes del amanecer en Alem o y Penha, el extenso conjunto de favelas del que forma parte Vila Cruzeiro. En la madrugada del mi rcoles, el fiscal general comunic que el n mero de muertos hab a ascendido a 132, por encima la cifra tristemente c lebre de la masacre en la prisi n de Carandiru (S o Paulo), donde 111 presos perdieron la vida en 1992. Entre las 4:15 h y las 9:00 h, cuando por fin llegaron los servicios funerarios del Gobierno, The Guardian pudo presenciar c mo decenas de cad veres eran transportados en camionetas a la plaza de San Lucas Evangelista, en Vila Cruzeiro. Nunca hab a visto nada igual... Todav a no consigo comprender qu ha oc me siento vac o, no tengo palabras , dijo el activista de la favela Raull Santiago ante la llegada de otro cargamento de cad veres y el frenes de las mujeres de la zona que buscaban a hijos, maridos y hermanos desaparecidos. Más allá de que estas personas estuvieran o no involucradas en el tráfico de drogas en la zona, en Brasil no existe la pena de muerte... Deberían haber sido arrestados Raull Santiago — activista La mayor a de los fallecidos parecen ser adolescentes, veintea eros y treinta eros. Es probable que muchos, si no todos, fueran miembros de la organizaci n local de narcos llamada Comando Rojo, contra la que iba dirigida la operaci n policial del martes. Casi todos los cad veres estaban desnudos, pero algunos llevaban trajes de camuflaje, la ropa que emplean francotiradores, cazadores y fot grafos especializados en vida silvestre para ocultarse en la vegetaci n. Entre las decenas de personas congregadas en la plaza hab a gente enfurecida. Dec an que la polic a deb a haber detenido a los j venes, antes que proceder a una ejecuci n sumaria. M s all de que estas personas estuvieran o no involucradas en el tr fico de drogas en la zona, en Brasil no existe la pena de muerte... Deber an haber sido arrestados , dijo Raull Santiago. Asesinos! Asesinos! , gritaba Cida Santana. Su hijo Fabio le hab a enviado un mensaje en torno a las 15.00 h del martes para decirle que hab a recibido un disparo en el pie y que estaba tratando de entregarse a la polic a. Diecis is horas despu s, el cad ver de Fabio yac a cubierto por una manta con estampado de flores y manchada de sangre. Su cuerpo parec a tener heridas de arma blanca en la zona del pecho. Dios m o! Haz un milagro, Dios! , suplicaba Cida, derrumbada en el suelo junto a su hijo muerto. Pero el hijo de Cida no resucitar , ni lo har n las docenas de cad veres con heridas de bala en las extremidades, el torso y la cabeza, alineados junto al suyo en el exterior de un restaurante de sushi. Uno de los hombres hab a sido decapitado, su cabeza dentro de una bolsa verde oliva en el suelo. Varios de los cad veres ten an los huesos gravemente fracturados o presentaban heridas punzantes en la carne. En algunos momentos, un silencio de estupefacci n se apoderaba de la multitud mientras continuaba el flujo de camionetas con nuevos cad veres. Nadie hab a visto nunca un derramamiento de sangre a esa escala. Ni los veteranos periodistas de sucesos, ni los predicadores de las reas tomadas por las bandas, ni los vecinos de las favelas, hastiados de la lucha. Hasta esta semana, la operaci n policial m s letal de R o hab a sido la redada de 2021 en Jacarezinho, otro basti n del Comando Rojo, durante la que murieron 28 personas. Es surrealista , dice Ant nio Carlos Costa, l der religioso y activista de derechos humanos al pedir la destituci n inmediata de Cl udio Castro, gobernador de R o de Janeiro y aliado del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro. En su opini n, lo ocurrido representa una humillaci n hist rica para Brasil en v speras de la cumbre clim tica de la COP30, que se celebra el pr ximo mes en la ciudad amaz nica de Bel m. En 30 años trabajando [en las favelas], este es el mayor acto de salvajismo que he presenciado Flávia Pinheiro Fróes — abogada En otros momentos, los espectadores estallaban de rabia al contemplar el dantesco espect culo. Conmocionados, los amigos y familiares de los fallecidos arrancaban las s banas que cubr an los cuerpos mutilados y exig an a los periodistas que filmaran la matanza para mostr rsela al mundo. Ay dennos, por favor! , imploraba temblando de rabia Cl udia Silva, de 53 a os, mientras denunciaba lo que ella y otros calificaban de genocidio . Cuando vienen aqu , matan hasta a las ratas , a adi , refiri ndose a la polic a. Esto ha sido una masacre, no una operaci n, vinieron a matar , dijo Cida Santana junto al cad ver de su hijo, sentada sobre una bolsa de basura cubierta de sangre. En 30 a os trabajando [en las favelas], este es el mayor acto de salvajismo, la mayor masacre que he presenciado , dijo la abogada Fl via Pinheiro Fr es, que hab a acudido para apoyar a los familiares de los fallecidos. Frente a una sensaci n generalizada de indignaci n creciente, el gobernador Castro sigue justificando la operaci n policial. Entre los cr ticos figura la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, que se mostr horrorizada por las muertes. Castro celebra que se haya asestado un duro golpe a los narcotraficantes fuertemente armados que a lo largo de los ltimos 40 a os se han hecho con el control de muchos de los cientos de favelas que hay en R o. El ufano gobernador Castro Las nicas v ctimas de ayer fueron los polic as , dijo el gobernador en referencia a los cuatro agentes muertos durante el intenso tiroteo del martes con los delincuentes. Narcoterroristas , los llam . Con la estola p rpura sobre los hombros, el sacerdote Edmar Augusto, de 50 a os, rociaba de agua bendita los m s de 50 cad veres que se hab an acumulado en la entrada de la favela mientras hablaba el gobernador. No queremos guerra, queremos paz , dijo a los dolientes de la favela con voz quebrada por la emoci n. Hay tantas familias llorando y yo quiero llorar con ellas, la sociedad no puede permanecer en silencio , increp el sacerdote antes de rezar el padrenuestro volviendo la mirada hacia el cielo. Mientras esperaba la llegada de otro coche cargado de cad veres, el presidente de la asociaci n de vecinos Vidal Correia record la advertencia que dos d cadas antes hab a hecho un grupo de misioneros evang licos: dec an que la favela sufrir a un d a una sangrienta masacre. No les cre mos, nunca cre mos que fuera a suceder , dijo. Pero ellos lo profetizaron y hoy se ha cumplido , lament .


Latest News
Hashtags:   

masacre

 | 

operación

 | 

policial

 | 

conmoción

 | 

Janeiro

 | 

brutal

 | 

redada

 | 

muertos

 | 

Sources