eldiario - 2 days ago

Los trabajos parlamentarios apenas avanzan sobre la trama corrupta de Ábalos y se estrellan con sonoros desmentidos en otros temasEl PP utiliza la comisión del Senado como un cajón de sastre contra el Gobierno El PP ha encontrado en el Senado la raz n de ser para controlar a su antojo a Pedro S nchez y a su Gobierno. Al menos eso intenta el partido de Alberto N ez Feij o desde que aprob una comisi n de investigaci n que no tiene parang n en la reciente historia parlamentaria. Una comisi n nica por su funcionamiento: la mayor a absoluta del PP en el Senado impone citaciones en tiempo r cord y ampl a el motivo de la comisi n cada vez que lo necesita. El primer objeto de la comisi n se defin a en 17 palabras: Sobre los contratos p blicos realizados durante la pandemia Covid relacionados con la intermediaci n de Koldo Garc a Izaguirre . Ese texto se ha cambiado varias veces en un a o. La cuarta modificaci n del objeto de la comisi n tiene 59 palabras y sirve para investigar casi cualquier cosa: Sobre los contratos, licencias, concesiones, ayudas y otras operaciones del Gobierno y del sector p blico, relacionadas con la intermediaci n de Koldo Garc a Izaguirre y con las dem s personas vinculadas a la trama investigada en la Operaci n Delorme, y respecto a los presuntos delitos relativos a la corrupci n que tengan una relaci n, directa o indirecta, o conexi n con las mismas . Tambi n es una comisi n nica por su n mero de comparecientes: en a o y medio han declarado 89 personas (hay otras 100 se aladas). Entre los citados hay ocho min por primera vez se ha convocado a un presidente de Gobierno en ejercicio y ya han pasado por ese rgano de control cuatro presidentes y expresidentes auton micos socialistas. Y es, adem s, una comisi n nica por los asuntos investigados: desde los negocios corruptos de mascarillas en pandemia, hasta el rescate de Air Europa, pasando por los contratos adjudicados por Red.es al empresario Juan Carlos Barrab s, el fraude del IVA en el negocio de hidrocarburos, la financiaci n del PSOE o los cursos que dirig a la mujer del presidente en la Universidad Complutense. Lo que naci con el objetivo de profundizar desde el Senado en la trama de corrupci n del ministerio de Transportes se ha convertido en una investigaci n flexible sobre todo lo relacionado con el exministro Jos Luis A balos y su asesor principal, Koldo Garc a, y, de propina, sobre la causa abierta en los tribunales contra Bego a S nchez, la esposa de Pedro S nchez. Desde la primera comparecencia (Koldo Garc a, 22 de abril de 2024) hasta una de las ltimas (Enriqueta Chicano, presidenta del Tribunal de Cuentas, 9 de octubre de 2025), los trabajos parlamentarios impulsados por el PP apenas han logrado avanzar en lo ya descubierto por los tribunales sobre la trama corrupta que enriqueci a Jos Luis A balos durante su etapa al frente de Transportes. Los senadores del PP chocaron con la verdad al intentar amplificar corruptelas, muchas sin contrastar, difundidas por medios de comunicaci n sobre los supuestos negocios il citos de Bego a G mez, sobre el supuesto ama o en el rescate (pr stamo de 475 millones) de Air Europa, o los supuestos destrozos de A balos en el parador de Teruel durante la noche en la que supuestamente le visitaron en su habitaci n prostitutas llegadas en furgoneta desde Valencia Testigos principales de esos supuestos delitos acreditaron en la comisi n del Senado con hechos y datos comprobables que se trataba de bulos muy burdos. Aqu van algunos ejemplos: La creaci n de Wakalua para lograr el favor de S nchez a trav s de Bego a G mez Leticia Lauffer, exdirectora de Wakalua, un rgano dependiente de Globalia, propietaria de Air Europa, compareci en la comisi n para hablar de sus relaciones con Bego a G mez. La mujer del presidente colabor con Lauffer en un proyecto com n de Globalia con el Instituto de Empresa. Apoyado en publicaciones de medios acostumbrados a no contrastar sus noticias, el PP acus a Leticia Lauffer de facilitar negocios de G mez con la venta de mascarillas en plena pandemia, y acus a Globalia de montar Wakalua con el nico objetivo de conseguir los favores de la mujer del presidente para el posterior rescate de Air Europa. Lauffer desminti con datos y hechos todas estas premisas falsas. Primero explic por qu no era posible vincular la creaci n de Wakalua con un plan de Globalia para conseguir los favores del presidente del Gobierno a trav s de su esposa, Bego a G mez: Wakalua se crea en 2018, y a Bego a la conocemos en noviembre de 2019, y la pandemia empez a finales de febrero de 2020. Con lo cual, a m no me entra en la cabeza que, a d a de hoy, con los datos en la mano, piensen que Wakalua se constituy para acercarse a una se ora que es la mujer del presidente del Gobierno, cuando del rescate se empieza a hablar durante o despu s de la pandemia en 2020 . Despu s explic Lauffer que ni ella ni Bego a se interesaron por el negocio de la venta de mascarillas en plena pandemia. Pregunta: Qu gestiones realiz para importar mascarillas? Porque, seg n las informaciones period sticas, Bego a G mez hizo gestiones con la entonces CEO de Wakalua, Leticia Lauffer, que es usted, para importar mascarillas y respiradores de China y Espa a en el inicio del confinamiento. Respuesta: No soy CEO de Wakalua. No hice ninguna gesti n para importar mascarillas. Esa es una filtraci n de una persona que va a tener una querella cuando pase todo esto, que es mi exmarido. Pregunta: Niega tajantemente que ard a su tel fono constantemente porque llamaban de La Moncloa? Respuesta. Esas son las interpretaciones de mi exmarido con The Objective. Pregunta. Qui n llamaba a qui n, Bego a a usted o usted a Bego a? Respuesta. No, no. Ni estoy en vuelos, ni he estado en temas de mascarillas, respiradores, ni chinas, ni chinos, ni nada de nada. Pregunta. Ni habl con Globalia del material sanitario? Respuesta. Cero, cero. Pese a las respuestas y explicaciones de Leticia Lauffer, el PP mantuvo hasta el final su tesis conspiranoica. El rescate de Air Europa sin la intermediaci n de A balos o S nchez Bartolom Lora fue el vicepresidente de la SEPI encargado de gestionar las ayudas del Gobierno para empresas en riesgo de quiebra durante la pandemia. Fue nombrado en 2017 por Crist bal Montoro y permanec a en su cargo cuando el Gobierno socialista aprob el rescate de empresas a las que dej sin actividad la pandemia. El PP le cit en la comisi n del Senado para confirmar que el pr stamo concedido a Air Europa, con el que la compa a a rea evit 10.000 despidos por su quiebra, era en realidad un trato de favor por la mediaci n de Bego a G mez y por las presiones de V ctor Aldama, que trabajaba para Air Europa, a Jos Luis A balos, al que soborn anteriormente en otros negocios. Pero todas las hip tesis que los senadores del PP arrojaron sobre Lora fueron desmentidas en la comisi n del Senado por el principal gestor de la ayuda concedida a Air Europa. Yo lideraba en ese momento el equipo t cnico de SEPI , explic Lora. M s por mi trayectoria profesional, soy un t cnico de la casa con conocimientos financieros y, por lo tanto, s intervine en algunas de las reuniones de los expedientes, no en todas, porque fueron al final 30 expedientes y hubo much simas reuniones. En el caso de Air Europa, s estuve en reuniones , dijo. Pregunta. Usted, en este rescate, habl con el se or A balos de este tema, de este rescate. Respuesta. Solo he tenido una conversaci n con l en una reuni n que hubo para informar sobre la puesta en marcha del Fondo de solvencia. Esa reuni n fue convocada en el Ministerio de Econom a y estaba la ministra de Econom a y la ministra de Hacienda, el se or A balos, y miembros tambi n de Econom a. El objeto de la reuni n fue contar como se hab a puesto en marcha el Fondo de solvencia y c mo se estaban aplicando los equipos para poder atender las operaciones. Era un procedimiento administrativo que estaba reglado y los ministros no interven an en la tramitaci n de esos expedientes. Pregunta. Usted tuvo alguna relaci n con Koldo Garc a. Respuesta. Ninguna relaci n. Conozco a esta persona por los peri dicos. Ya le he dicho, nunca hable con l ni nunca particip en ninguna reuni n con l, ninguna. Pregunta. Tuvo alguna relaci n con el empresario V ctor de Aldama, en la condici n de usted vicepresidente de la SEPI? Respuesta. Ni como persona f sica individual ni como vicepresidente de SEPI. Ya le digo que no tuve ni he tenido ninguna conversaci n. No tengo ninguna llamada, ning n mensaje del se or Aldama. Bartolom Lera asegur ante la comisi n de investigaci n que la ayuda a Air Europa fue impecable: Nosotros ten amos que verificar que se cumpl an los requisitos y la normativa. Los deberes, los requisitos y la normativa se cumplieron absolutamente. Pero es que eso ha sido fiscalizado por el Tribunal de Cuentas, por la IGAE, por la Uni n Europea, y todas han dicho que no ha habido ninguna irregularidad, que se han aprobado las ayudas conforme a derecho . Una org a de A balos en el parador de Teruel que nadie pudo acreditar El PP dio por buenas las noticias que situaban al exministro A balos en distintos paradores de Espa a (Gredos, Sig enza ) causando todo tipo de destrozos tras organizar fiestas con prostitutas en su habitaci n. La ltima noticia sobre estos supuestos desmanes de A balos le situ en el parador de Teruel durante una reuni n con altos cargos de Arag n y del ministerio de Transportes. El director del establecimiento, Joaqu n Guti rrez L pez, compareci en la comisi n del Senado para asegurar que se trataba de otro bulo. Director del parador. Yo recib al exministro en aquel momento, vino en su coche, no hab a ninguna furgoneta y la nica persona que le acompa aba en esos momentos y al que salud era Koldo Garc a. Ven a cansado, me dijo el se or ministro, y pidi que le di semos la carta para pedir la cena en la habitaci n. Pregunta. El Diario de Teruel revel la existencia de unas facturas por destrozos de las habitaciones del se or ministro, hoy imputado por graves delitos, y el se or Koldo, asimismo tambi n imputado, entre otros. Facturas que habr an sido devueltas por el Ministerio a quienes se giraron. Qu me puede decir de esto? Respuesta. Le puedo decir que esa factura no existe, dado que no existen los da os y no existe reparaci n y no existe nada. Donde no hay un da o, no puede haber ni reparaciones ni facturas. No se hicieron ning n tipo de facturas.

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